TURQUÍA
Año de Inscripción: 2013 - Categoría: "Inmaterial Cultural"
El café turco combina técnicas especiales de preparación y elaboración con una rica cultura tradicional comunal. Los frijoles recién tostados se muelen hasta obtener un polvo fino; luego, el café molido, el agua fría y el azúcar se agregan a una cafetera y se preparan lentamente en una estufa para producir la espuma deseada. La bebida se sirve en vasitos, acompañada de un vaso de agua, y se bebe principalmente en cafeterías donde la gente se reúne para conversar, compartir noticias y leer libros. La tradición en sí es un símbolo de hospitalidad, amistad, refinamiento y entretenimiento que impregna todos los ámbitos de la vida. Una invitación a tomar un café entre amigos brinda la oportunidad de tener una conversación íntima y compartir las preocupaciones diarias. El café turco también juega un papel importante en ocasiones sociales como ceremonias de compromiso y días festivos; sus conocimientos y rituales son transmitidos de manera informal por los miembros de la familia a través de la observación y la participación. Los posos que quedan en la taza vacía a menudo se usan para saber la fortuna de una persona. El café turco se considera parte del patrimonio cultural turco: se celebra en la literatura y las canciones, y es una parte indispensable de las ocasiones ceremoniales.
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